El secreto es que no te importe que te duela

Bien, ya puedo decir, con una satisfaccion casi infantil ( aquellas partidas de canicas ganadas, aquel cromo conseguido...) que he hecho mi primer coctel. Y ademas, no ha sido ninguno de los que tenia en el libro de mi madre, sino que me lo he inventado por completo, lo que me hace sentir todavia mejor. Es cierto que le faltan unos retoques, como la crema de leche para darle mayor suntuosidad al asunto, pero en lineas generales, para haber sido el primero que hacia en mi vida, no esta nada mal. Lo he bautizado como "Lawrence de Arabia" ( porque reune la densidad de las dunas y el amargor del desierto y, claro esta como homenaje a la peli de mi admirado Peter O'Toole), aunque yo cariñosamente lo llamo simplemente "un Lawrence", en fin, es un coctel muy sencillo, y, en su fase embrionaria, muy muy rico ( A saber: una parte de vodka, dos de whisky y tres o cuatro de batido de vainilla), aunque como he dicho, posiblemente lo mejore esta semana. Aunque, eso de hacer planes esta visto que no es lo mio, por lo que puede ser que esta optimizacion tarde dos, tres o X semanas en realizarse, no prometo nada. Ya me ha pasado con otras cosas como los libros de filosofia ( o con el de Pynchon, lo tengo desde hace mas de un año y ni siquiera lo he empezado), o mas recientemente, con Noelia. No me atrevo a coger dos barras de pan y ponerme en su caja, la que esta junto a la puerta, esperar a que me toque y, decirle casi sin mirarla a los ojos: hola! que tal? cuanto tiempo...dios, que ridiculo mas espantoso, eso, claro esta, contando que el recibimiento fuera amistoso o pseudo amistoso por su parte, porque tambien puede pasar ora que no me dirija la palabra mas que para decirme "son cuatro con setenta euros" ora que me mande a tomar por culo, cosa por otra parte perfectamente legitima despues de mi huida. Llevo varios dias con necesidades espirituales, leyendo la biblia mientras escucho A Love Supreme de Coltrane ( vaya mezcla tan cojonuda) o libros sobre budismo, pero no puedo despegarme de ese miedo de niñato que me persigue toda mi vida, y enseguida caigo en el error de autoconvencerme de que no necesito a nadie, que el mundo es una mierda y que Harper Lee y J.D. Sallinger no pueden ( podian en este ultimo caso) estar equivocados, pura palabreria. O suicidio social, llamalo, tu, lectora invisible, como quieras, el caso es que las cosas faciles para la mayoria me resultan insufriblemente dificiles, lo que seria un trato justo si, como contrapartida me resultaran faciles las cosas que a la gente le suponen unos esfuerzos titanicos, pero de momento, de esto ultimo solo tengo la sospecha, una sospecha que si, se cumplira con el tiempo, pero que ahora, esta lejos, muy lejos de poderse cumplir ( y no, no pienso desprenderme de mis delirios megalomanos). En fin, que mi unica alegria estos dias es la de ir al gimnasio como un hamster corre en su rueda ( sin pensar y con la conviccion de que esta moviendo al mundo con sus actos)y la de pensar que me estoy limpiando espiritualmente con mis lecturas budistas. Sin embargo, no puedo dejar de pensar en Noelia y en mi cobardia tan notoria.